La palabra actuar viene de acción, y
no se trata más que de eso, de poner en acción el juego con títeres. Actuar por
el placer de realizar acciones con objetos en función dramática.
En el comienzo se trata de juego de
exploración e investigación, juego paralelo y/o encuentros con el otro. Juegos
breves, muy breves o más largos, de acuerdo a las posibilidades de cada niño.
Juego que se repite una y otra vez, juego exploratorio constructivo, que puede
desarrollarse a lo largo de todo el año.
Juego en el que nuevos materiales se incorporan sin descartar al
material anterior.
Los más chiquitos disfrutan de éstos
extraños seres animados que aparecen y desaparecen. Más tarde, descubren que
ellos mismos pueden dotarlos de vida.
Sea el títere de la sala o cualquier otro, llega el tiempo en el que los
espectadores se animan a poner una mano dentro del títere. Así lo dotaran de
vida, lo animarán, lo transformarán y se transformarán.
Entonces comienza una nueva etapa.
Dejarán de ser espectadores y disfrutaran siendo ellos mismos los titiriteros o
animadores. El goce de ver a los propios títeres moverse, el escuchar las
diferentes voces con las que se desarrollan los personajes ya es una aventura
en sí misma.
Los primeros títeres son los deditos
actuando la letra de las retahílas como:
"Este dedo es la mama...etc."
"Este compro un huevito...."
Considerando a sus dedos como
personajes ajenos a ellos mismos aunque formen parte de su propio cuerpo, dando
crédito a las secuencias simples que representan.
En el caso de los niños más
pequeños, primero habrá un acercamiento material de observación, investigación,
y encuentro con el objeto títere: observarlo por fuera y por dentro, animarse a
poner un dedo o la mano dentro, chuparlo, golpearlo, etc.
Ponerlo en su mano y observarlo, es una acción que parece escasa y de una riqueza limitada, sin embargo no lo es.
Ponerlo en su mano y observarlo, es una acción que parece escasa y de una riqueza limitada, sin embargo no lo es.
Cuando los niños atraviesan la
experiencia del taller de títeres, muchas veces casi no se perciben
movimientos, algunos niños se vinculan introspectivamente con el títere,
demoran en poder transmitirle al títere sus deseos de animación.
Los movimientos mínimos, el contacto
efímero con el material, el pasaje de un títere a otro sin poder armar un
vínculo o juego, el deambular observando, el pasar debajo de la tela que se ha
colocado como retablo una y otra vez sin concentrarse en la actividad
esperable, son formas de reconocer el espacio y el material, integran la
construcción del juego con títeres. Concluyendo la idea, los títeres, como
cualquier objeto de exploración, deberían ser presentados sin la ansiedad de
logros. Jugar con títeres también es un
conocimiento que se construye.
Para el niño el títere
es un personaje casi mágico y por eso asisten asombrados a una representación,
en la que un muñeco, se desplaza por el escenario y dialoga espontáneamente con
ellos. A través del títere los niños se introducen en un mundo de fantasía en
el que la imaginación pone los ingredientes necesarios para vivir plenamente la
ficción.
El poner en contacto a los niños con
ésta rama del arte les posibilitará contar con una herramienta más para
desarrollar su inteligencia, su percepción y su sensibilidad, en éste caso
utilizando formas e imágenes visuales en movimiento.
El títere puede ser utilizado en
función dramática o como medio de comunicación. Tanto por un adulto como
también por un niño muy pequeño.
En el caso de los adultos, es
sencillo.
·
El docente utiliza al títere como un medio para lograr
otro fin que no sea el de la expresión del títere en sí misma. Quiere presentar
una técnica, quiere llamar la atención de los chicos, etc.
·
El docente representa una obra, realiza un juego
titiritesco o canta una canción con el títere por el mero deseo de disfrutar de
los movimientos del títere.
La diferencia es clara. En el primer
caso, se utiliza a los títeres como un medio para lograr otro fin, intentando
comunicarse con los chicos y una vez que se logra el objetivo el títere pasa a
un segundo plano.
En el segundo caso, la docente canta
o juega con el títere o bien representa una pequeña obra, por el deseo de
expresarse utilizando ese medio y captando la atención de los niños con un
objetivo expresivo sin perseguir otro fin que no sea el juego dramático
representado.
En el caso de los niños, también
ellos utilizan a los títeres de diversos modos, por el placer del juego o por
la necesidad e comunicarse a través de un medio más convincente (para ellos
mismos) que su propia persona
El juego con títeres utiliza como
punto de partida al juego exploratorio, entendiendo como tal a aquel momento
durante el cual los materiales son presentados a los niños, quienes se
involucran creativamente con ellos haciéndolos hablar por si mismos.
Es importante que exista ese momento
de exploración con los elementos utilizados para realizar juegos titiritescos,
durante el cual, los niños comienzan a ponerse en contacto con la materia prima
de sus títeres, o bien con los títeres en sí para jugar con ellos del modo que
naturalmente les surja, sin que sea necesario señalar la necesidad de utilizar
un teatrino o retablo en el cual el juego quede delimitado, a menos que los
mismos chicos busquen éstos espacios por la necesidad de ocultamiento que
puedan desear experimentar.
Lo importante es pensar propuestas
que permitan a los niños explorar libremente el material. Cada material ofrece
distintas posibilidades de expresión. Las posibilidades deberán ser graduadas y
se deberían ir complejizando poco a poco, incorporándose elementos nuevos, o
estímulos nuevos en la medida en que la docente a través de su lectura
reconozca en los chicos la necesidad de los mismos.
La repetición de la oferta de juego
no debiera ser una escena temida ya que nunca se repiten las escenas de juego.
Al contrario se modifican y se enriquecen de acuerdo al estado de ánimo de los
niños.
Aproximarse al juego con títeres
posibilita a los seres humanos expresarse y canalizar sus emociones animando
cuerpos prestados, liberando tensiones y relacionándose con los otros.